1929: el paciente expulsa ciempiés vivo de la nariz

En 1929, un médico de Eastbourne, J. Gordon Wilson, informó haber tratado a un paciente que durante más de dos años padecía:

“…sufría dificultad para respirar por la nariz, sordera, ligero vértigo y dolor de cabeza. Sin embargo, durante las últimas semanas, una fosa nasal parecía estar definitivamente obstruida y la opresión y la irritación en la nariz le provocaron insomnio y estornudos. Se produjeron silbidos nasales involuntarios, de los que buscó alivio respirando por la boca.

El paciente soportó estos síntomas durante dos años, hasta que el problema se resolvió solo:

“Una mañana, cuando intentaba limpiarse la nariz, un ciempiés grande y muy activo fue expulsado por una de las fosas nasales. Con cierta dificultad capturó vivo al ciempiés y me lo trajo en una caja. Desde aquella mañana su nariz se siente mucho más cómoda; la dificultad para respirar nasal y la irritación local prácticamente han cesado... El paciente no hace jardinería y no recuerda haber olido flores en ningún momento durante los últimos dos meses”.

Una imagen del ciempiés, enviada con el informe del médico, sugiere que medía alrededor de tres pulgadas de largo. Un examen del artrópodo estornudado y su antiguo hogar pareció verificar la historia del paciente. El Dr. Wilson descubrió que el interior de la nariz del paciente estaba distendido y ligeramente inflamado, pero por lo demás intacto.

Fuente: British Medical Journal, vol.1, no.3557, 9 de marzo de 1929. El contenido de esta página es © Alpha History 2019-23. El contenido no puede volver a publicarse sin nuestro permiso expreso. Para obtener más información, consulte nuestra Condiciones de Uso or contactar a Alpha History.